Hace tiempo que no publicaba nada en esta sección, la verdad es que es un tema que me llama la atención y justo ahora estoy leyendo el libro «Alimentos desperdiciados» de Xavier Montagut y Jordi Gascón, es más sencillo que otros en donde hablan mucho de estadísticas y números, este libro es más concreto sobre el problema del desperdicio alimenticio, principalmente en Europa y un tema que me llamó la atención fue la mención que hacen al cacao.
En un apartado del libro se hace una gran referencia al tema del cacao y del desperdicio que se comenzó a generar en su producción luego de que la Comisión Europea decidiera aprobar una ley en la que plantea la sustitución de la manteca de cacao por otras mantecas vegetales, lo cual evidentemente produce dos problemas, uno es que disminuye la calidad del producto y también el impacto negativo que tendría en países productores. Ahora el problema con el desperdicio se genera por que una parte importante de la semilla del cacao se convierte en residuo: aquella de la que se extrae la manteca de cacao, este alimento de gran valor nutritivo se convierte ahora en desecho.
Esto beneficia a varias empresas transnacionales, debido a que se aumentan las ventas de chocolate en el mundo y en verano también, ya que al usar otras mantecas vegetales como el aceite de palma o de soya que tienen otras propiedades químicas, como pro ejemplo que son resistentes a la fusión, hace que el chocolate disminuya su calidad y claramente en verano no se derrita como debería.
Me dejó realmente intrigada este tema y empecé a leer más sobre el tema del cacao y es así como llegué a conocer el proyecto de una chef venezolana que recientemente ganó un premio por su labor social como chef y es realmente inspirador su trabajo y es para motivarnos, siendo chefs o no a poner de nuestra parte para hacer de este mundo uno mejor en la manera en que podamos.
Hace ya un tiempo que la chef venezolana María Fernanda di Giacobbe ganó el premio que otorga el Basque Culinary Center en España por su labor para sacar a las mujeres de la pobreza en su país gracias al cacao. Trabaja con comunidades locales que producen cacao para que mejoren su producto y lo puedan exportar a los mejores chocolateros del mundo.
La chef venezolana señaló «que podía contribuir con la sociedad más allá de la cocina» de esta manera ayuda a las comunidades en una Venezuela que está en una situación compleja, le da oportunidades a mujeres venezolanas capacitándolas y convirtiéndolas en micro empresarias del chocolate. Si les interesa más pueden ver su página web aquí.
Joan Roca el presidente del jurado que otorga este premio señalo que «la ganadora refleja el valor que puede dar la cocina de la ciencia a la conciencia. En torno a un símbolo gastronómico como el cacao, articula esfuerzos que inciden positivamente en toda la cadena que involucra el chocolate, es además un ejemplo inspirador, que refleja el poder que puede ser la gastronomía, independiente de cuan complejo sea el contexto. Los chefs sí pueden marcar la diferencia»
María Fernanda, a través de talleres de bombonería, ha formado a unas 8.500 personas y ha contribuido a la graduación de unos 1.500 venezolanos en el Diplomado de Gerencia de la Industria del Cacao (un 94%, mujeres) en la Universidad Simón Bolívar; y unas 18 comunidades cacaoteras y 60 productores se han incorporado a su proyecto Cacao de Origen, a través del que se mejoran procesos de producción, fermentación y comercialización de sus cacaos con el objetivo de exportarlos con certificaciones de origen a maestros chocolateros de otros países alineados con el movimiento Bean to Bar.
Las fotos las saqué de www.google.com (no son de mi propiedad)
1 Comentarios
Muy interesante lo que aquí escribes.