Una vez más, el año pasó muy rápido y, así como si nada, llegó diciembre y el fin de año. Lamentablemente, este año no pude ir a Chile a ver a mi familia, así que será otra Navidad en el hemisferio norte, por lo que mi postre para esta Navidad será definitivamente algo calórico y con muchas castañas, como bien dice la tradición.
Tenía unas latas de crema de castañas del año pasado, que compré cuando estuvimos en París, y decidí darles un uso. El año pasado hice un postre clásico francés para esta época, llamado Mont Blanc, que es tradicionalmente con crema de castañas y crema chantilly y su forma emula la montaña llamada Mont Blanc.
Este tronco de Navidad tiene muchas castañas, en todos sus formatos, así que es intenso y delicioso a la vez. El tronco tiene una crema de limón para aportar acidez, un crujiente de chocolate y castañas, mousse de castañas.